Los suelos de madera son una alternativa muy popular, gracias a la apariencia elegante, natural y cálida que aporta a los espacios donde se instala. El parquet es un tipo de superficie que cumple con todas estas características, pero para conservar su estética y alargar su vida útil, es importante hacerle mantenimiento con cierta frecuencia y evitar situaciones que puedan dañarlo. Si quieres saber, ¿qué estropea el parquet?, y qué hacer en esos casos, sigue leyendo.
Tabla de Contenidos
Principales factores que estropea el parquet
Humedad y filtraciones
La humedad es un factor que puede afectar seriamente a los suelos de madera. Es importante evitar derrames de líquidos que luego puedan filtrarse por las uniones del parquet, y si ocurren es indispensable limpiar de inmediato para que no provoque daños en el material.
Luz solar y decoloración
Cuando el parquet recibe luz solar directa puede perder el color con el tiempo o puede causar que las tablas luzcan hundidas en el centro y levantadas hacia los bordes.
Para evitar esto, se recomienda colocar persianas o cortinas para evitar que se filtre el sol a la habitación donde hay parquet.
Muebles pesados y arrastres
En el caso de los muebles pesados, aunque no se muevan de lugar, ejercen presión sobre el parquet, tanto por su propio peso, como al sentarse en ellos; esto puede provocar desgaste y marcas. Lo mismo ocurre cuando se arrastran muebles.
Limpieza inadecuada y productos abrasivos
Los productos de limpieza abrasivos y los métodos de limpieza equivocados pueden tener un impacto negativo en el aspecto y la duración del parquet.
Los productos fuertes pueden dañar la capa superior del parquet y quitar el brillo de la superficie. Además, utilizar artículos como lanas de acero o artefactos como aspiradoras de cabeza dura, pueden causar arañazos, desgaste y dejar marcas.
Cómo prevenir el desgaste del parquet
Uso de protectores en muebles y sillas
Colocar almohadillas protectoras debajo de todas las patas de los muebles permite proteger el parquet de desgaste, rayones y arañazos, para que no haya contacto directo con la superficie de madera. Cuando sea necesario mover los muebles puede recurrirse a una manta o toalla para arrastrarlos sin causar daños al suelo.
Control de la humedad en el hogar
La humedad y la acumulación de líquidos pueden afectar mucho los revestimientos de madera, por lo que no se pueden mojar. Es importante tratar de mantener la superficie seca, para evitar que el parquet se expanda o pierda su forma.
Técnicas adecuadas de limpieza
Para la limpieza del parquet no deben utilizarse trapeadores de vapor, ya que la humedad y los cambios de temperatura pueden penetrar por las grietas y deformar la madera.
Lo mejor es utilizar un trapeador suave con un detergente neutro o un producto especial para suelos de madera. Así como utilizar la menor cantidad de agua al momento de la limpieza del suelo.
Métodos para reparar un parquet dañado
Dependiendo del grado de deterioro del parquet, es posible optar por métodos de reparación que permitan devolver la funcionalidad y la apariencia al suelo de madera.
Lijado y barnizado
Cuando el parquet luce muy desgastado en gran parte de su superficie, optar por acuchillar el parquet es una alternativa muy efectiva para recuperar la apariencia del suelo.
El lijado permite quitar la capa más superficial del revestimiento que ha perdido su brillo y que luce deteriorado. Luego, se debe aplicar el barniz. Pueden ser necesarias varias capas.
Relleno de grietas y arañazos
Con el uso de productos reparadores y abrillantadores de piso, pueden ayudar a corregir los daños como grietas o arañazos. Luego de aplicar este tipo de productos se debe pulir la superficie para recuperar el brillo perdido o aplicar una masilla especial para parquet.
Cuando se trata de grietas o arañazos más profundos, puede ser necesario lijar para alisar la superficie. Y para completar la restauración se aplica sellador y barniz.
Sustitución de lamas deterioradas
Si el desgaste es profundo, las manchas muy evidentes o hay abolladuras y deformaciones en las lamas del parquet, lo más recomendable es cambiar las láminas dañadas. Después de identificar las lamas dañadas, es necesario extraerlas y luego preparar la superficie para colocar las nuevas, asegurándose de que tengan el tamaño exacto y que queden bien encajadas.
Para finalizar, puede ser necesario aplicar barniz o aceite, para emparejar el acabado con el resto del suelo.
Cuándo considerar la sustitución del parquet
Daños estructurales graves
Cuando existen daños graves, como grietas muy profundas, abolladuras, huecos o deformaciones en gran parte de la superficie del parquet, cambiar solo algunas lamas no es la mejor opción. Por lo cual, se debe pensar en reemplazar todo el parquet o gran parte de él.
Algunas señales que pueden indicar que es necesario sustituir el parquet son los crujidos al caminar, los desniveles en la superficie o notar lamas despegadas o separadas entre sí.
También si hay daños graves por humedad o por hongos, es posible que se deba considerar sustituir el parquet.
Precios y beneficios de la renovación vs. sustitución
Renovar o reparar el parquet es efectivo para daños menores, y tiene la ventaja de que se ejecuta en un tiempo menor y requiere de un presupuesto más reducido; ya que, solo requiere lijado, reparaciones puntuales y luego aplicación de barniz. En cambio, en casos más complejos, cuando el daño es grave, sustituir todo el parquet puede ser necesario.
Al sustituir el parquet, podrás disfrutar de un suelo completamente renovado sin problemas estéticos o estructurales, pero hay que considerar que esto implica un gasto mayor en cuanto a materiales y mano de obra.
En la decisión entre la renovación o sustitución del parquet, además del presupuesto, también influyen varios aspectos como nivel de desgaste o daño, el tipo de parquet y las preferencias personales en cuanto a la apariencia del suelo de la habitación.
Recuerda que el cuidado y el mantenimiento preventivo es esencial para alargar la vida útil del pavimento. Ahora que conoces qué estropea el parquet y que puedes hacer para evitarlo, toma todas las medidas posibles, y seguirás disfrutando de tu suelo de madera como el primer día.