Cuando llevas a tu peque a jugar quieres que esté en un ambiente seguro y limpio. El pavimento de las áreas de juegos tiene mucho que ver con ello; por eso queremos hablar sobre cómo deben ser los suelos de parques infantiles. Sigue leyendo para aprender más al respecto.
Tabla de Contenidos
¿Cómo deben ser los suelos de parques infantiles?
Los parques en el exterior son zonas en las que los niños se divierten, corretean y disfrutan de cada uno de los juegos disponibles. Estas áreas deben ser lo más seguras posible para evitar lesiones graves en caso de alguna caída.
El suelo que elijas para el parque tiene un papel importante en la prevención de accidentes.
Normativa y estándares de calidad
En cuanto a la seguridad, en España existe la norma UNE EN 1177:2018 que establece cuál debe ser el grosor mínimo en el revestimiento de los parques infantiles. Para ello se tiene en cuenta la altura de caída crítica.
Si la altura de caída crítica está entre 60 y 80 centímetros, el grosor del suelo debe ser de 2 centímetros. El espesor aumenta de forma progresiva hasta los 11 centímetros cuando la altura de caída es de 240 centímetros.
La altura de caída crítica es el punto más alto desde el que un niño puede caer en un parque.
Amortiguar en caso de caídas y golpes
Durante su estancia en los parques, los niños corren, saltan y usan los juegos disponibles. Aunque estén muy seguros, siempre existe el riesgo de que sufran alguna caída o se den un golpe.
Por ello, es importante que los suelos de zonas infantiles sean capaces de amortiguar en caso de caídas. De este modo, es posible evitar lesiones o reducir su gravedad.
Resistentes
Es importante que los suelos para parques infantiles se mantengan en buen estado y duren mucho tiempo. No se trata sólo de evitar cambiarlos con frecuencia, sino que un pavimento deteriorado pierde sus características protectoras.
En estas zonas de juego, el suelo debe resistir el uso, las pisadas de los pequeños y las condiciones ambientales. Al elegir, opta por un material que no se agriete ni se deforme con facilidad. Si esto ocurriera, puede convertirse en un riesgo de seguridad para los niños.
Deben ser permeables
Los suelos permeables evitan que se formen charcos que impida a los peques jugar en los parques. Cuando vayas a comprar suelos para parques infantiles, pregunta si son permeables.
Los parques en exterior están expuestos a las lluvias, además, cuando se limpian también pueden acumular agua. Por ello es importante que sean capaces de dejar pasar los líquidos sin que queden en la superficie.
Que sean antideslizantes
Otra característica fundamental de los suelos de parques infantiles es que sean antideslizantes. De este modo se reduce la posibilidad de que se produzcan resbalones que puedan causar alguna lesión.
Resistentes al clima
Las zonas de juego que están en el exterior deben enfrentar los cambios climáticos y fenómenos ambientales. El sol, la lluvia, la nieve, el hielo, etc. Por ello hay que elegir un suelo que resista a estos fenómenos y no se deteriore con rapidez.
Comodidad a la hora de jugar
En los parques, al igual que los suelos de guarderías y otras zonas infantiles, el pavimento debe proporcionar confort a las pisadas de los niños. Es decir, que debe ser suave y, al mismo tiempo, firme para que caminen y jueguen con tranquilidad.
Sin componentes tóxicos
Hay que evitar los suelos que liberen sustancias químicas al aire, ya que estas pueden afectar la salud. De igual modo, al momento de limpiarlos no se deben usar productos químicos que puedan quedar en la superficie.
¿Cuáles son los suelos para parques infantiles más comunes?
Existe una diversidad de materiales que se pueden instalar en los parques infantiles. Aunque hay alternativas naturales, estas presentan un par de inconvenientes principales.
En primer lugar, es difícil cumplir con las normas respecto a la protección en casos de caídas de altura. Luego, está el tema de la higiene, ya que es más difícil que los peques se mantengan limpios.
De manera que los materiales sintéticos son la alternativa ideal para los parques infantiles. Con estos es mejor controlar las características que deben tener. Los suelos más comunes para estos casos son el césped artificial y el caucho. Conozcamos el porqué.
Césped artificial para parque infantil
El césped sintético es una de las alternativas preferidas para las zonas de juego infantil por diversas razones. Se trata de un suelo versátil, capaz de imitar muy bien la hierba natural, pero con la ventaja de ser más limpio y duradero.
Este pavimento requiere de poco mantenimiento y es fácil de limpiar. Además, se consigue en diferentes colores y es posible combinarlos para delimitar distintas zonas en las áreas de juego.
En cuanto a la seguridad, es necesario instalar un acolchado bajo el césped que será el encargado de absorber los impactos.
Suelos de caucho para parques infantiles
El pavimento de caucho puede ser continuo o en losetas y se consigue en diversos espesores, por lo que no habrá problemas para cumplir con las normas de seguridad. Además, este pavimento se puede instalar sobre cualquier superficie sólida como el hormigón o el asfalto.
Las losetas de caucho para parques infantiles cumplen con todas las características que deben tener el pavimento en estas zonas. Son antideslizantes, resistentes al uso y duraderas. Por otra parte, se fabrican con caucho reciclado, por lo que también son amigables con el medio ambiente.
Con este pavimento se pueden crear diversas combinaciones para conseguir un diseño atractivo en los suelos de los parques. Y las losetas tienen la ventaja adicional de que son fáciles de instalar.
El caucho continuo, en cambio, sí requiere que lo instale un especialista.
Ambos materiales, tanto el césped como el caucho, son estéticos y funcionales a la hora de pavimentar un parque infantil. Evalúa cuáles son las características que buscas para escoger el que más te conviene.
Los suelos de goma son también una buena opción.
Otros materiales alternativos (arena, grava, etc.)
Además del caucho y el césped artificial, hay otras opciones naturales para suelos de parques infantiles, que pueden amortiguar caídas y reducir el riesgo de lesiones en los niños, son la arena, la gravilla, y la madera triturada.
- La arena, ofrece buena amortiguación en caso de caídas, sin necesidad de una gran inversión. Es un material de fácil instalación; sin embargo, hay que tener en cuenta que requiere de mantenimiento continuo para evitar que se endurezca y también se contamine.
- La gravilla, por su parte, es otro material que ofrece buena amortiguación. Aunque es importante verificar que el tamaño sea el adecuado para un parque infantil, de modo que se puedan evitar lesiones en los más pequeños. Toma en cuenta requiere también mantenimiento continuo para evitar que se compacte.
- La madera triturada: Si se busca una alternativa que además de ofrecer comodidad, estética y protección, también sea ecológica, esta resulta ideal. Son pequeñas piezas de madera, que hacen un soporte que reduce los riesgos de lesiones. Se trata de una opción suave, que ofrece una sensación agradable bajo los pies y evita raspones. Al igual que las anteriores opciones, requiere de mantenimiento frecuente.
Costes y factores de inversión
Diferencias de precio según el material
El precio de estas losetas de caucho es muy variado, y pueden costar desde 3 € hasta 40 € de acuerdo a la altura, tamaño y densidad. Los rollos de caucho reciclado van desde 7 € hasta 27 €.
Por su parte, el césped artificial puede costar desde 4,14 € el metro cuadrado hasta 31,99 €.
En cuanto a la arena, por metro cúbico puede llegar a costar entre 10 y 30 euros, mientras que el de gravilla entre 20 y 40 euros y el de madera triturada entre 30 y 50 euros.
Análisis de coste-beneficio a largo plazo
El precio del material total va a depender de factores como la cantidad, el tipo y el proveedor. Una de las opciones más costosas es el caucho, pero es la más duradera; mientras que el césped es resistente con un precio similar. Otras opciones como la gravilla, la arena son más económicas, y la madera triturada tiene un costo intermedio.
Consejos finales para elegir el mejor suelo
La seguridad de los niños es uno de los principales factores a considerar cuando de un suelo para parques infantiles se trata. Es importante la absorción de los impactos, considerar si se requiere algún material antideslizante y que sea libre de componentes que puedan resultar tóxicos.
Antes de elegir, se debe tener en cuenta el mantenimiento debido a que materiales como el caucho y el césped artificial son de fácil mantenimiento, pero la arena y la gravilla requieren de mantenimiento continuo.
En cuanto a la estética, opta por suelos que se integren con el entorno, y que combinen con el diseño del parque. Además, el clima de la zona también tiene importancia para elegir el suelo adecuado.
Por último, pero no menos importante, el presupuesto es esencial, no solo la opción más económica es la mejor, considera primero todos los factores antes de tomar una decisión.
Ahora conoces cómo deben ser los suelos de parques infantiles. Asegúrate de que cumplan con estas características para que los peques estén seguros en su zona de juegos.